Realmente Gary Hamel tiene razón.
Nuevos tiempos, nuevos retos, nuevas tecnologías precisan nuevas formas de gestionar.
Y lo que es más importante, nuevas formas de entender la aportación de las personas a los proyectos "empresariales"
El nuevo trabajador en el nuevo mundo de la "infonomía" ha destrozado el paradigma marxista que entendía que el hombre alienaba su vida por un plato de lentenjas.
Superada, de lejos, aquella fase, entramos, a la fuerza, en un mundo en donde la diferencia viene marcada por nuestra capacidad de inventar, de innovar y de aplicar la novedad a nuestras vidas de una forma pragmática.
Pragmática?
En la socidad del ocio?
Ahora bien, no nos engañemos, seguimos siendo una sociedad profundamente capitalista.